24 marzo 2011

A las 14.28

Cosas, pensamientos, ideas, razones. Todo en minutos, segundos que en un parpadeo ya han archivado trozos de vida y algunos sentimientos. Y en ese trance, con la música como testigo, aquellas letras atraviesan el alma y rompen los vacíos.


Cobardía: guardar las palabras, miedo: renunciar a ello. "Porque tengo el corazón equivocado por quererte demasiado".



3 comentarios:

Yessi dijo...

No hay corazón equivocado, solo mal correspondido...

Te dejo un fuerte abrazo.

Noe dijo...

es duroo pensar q la otraa personaa no seintee lo mismo qee tuu :(
tee veo x mi blog! un ebsiitoo!
muuuaaaCk!

Gastón dijo...

Algunos corazones ponen la música de fondo mientras escribimos, más allá del ritmo de nuestros propios latidos.

Publicar un comentario