Un día soleado, caluroso, sediento, ardiente...una mañana cualquiera, un año bueno y malo...una vida tranquila, inquieta, desnuda, aventurera. Y todas las compañías que han sido y ya no, un brindis con sabor a Coca Cola por los recuerdos, por las pequeñeces.
Un toque de copas por la brisa cálida y la primavera, una coincidencia de miradas, todos ellos conjugados con el objeto de tantos afectos... despedidas y llegadas. Un brindis porque siempre habrán motivos para deshojar pensamientos, sentimientos y emociones a través de canciones y literatura.
Un toque de copas por la brisa cálida y la primavera, una coincidencia de miradas, todos ellos conjugados con el objeto de tantos afectos... despedidas y llegadas. Un brindis porque siempre habrán motivos para deshojar pensamientos, sentimientos y emociones a través de canciones y literatura.
Un brindis para dos, para tres, para veinte, para cien y para el resto: "Destapa la felicidad".
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