- Alguna vez intenté no quererlo, pero supongo que lo que más se teme, es lo que sucede Camila.
- Y entonces, ¿dónde quedan todas las cosas que alguna vez les pertenecieron, o los sentimientos? no todo puede irse al carajo y luego levantarte una mañana y no tener nada.
- ¿Acaso no lo entiendes?, no se trata de mantener una promesa, o de procurar estar siempre juntos, la gente se marcha todo el tiempo, no se puede detener a alguien cuando su corazón ya no siente más por ti. Eso sería mendigar amor.
-Entonces, no era amor. Supongo que eso va más allá de la piel, de las palabras... sabes, yo creo que el amor es inconmensurable, no se puede medir, ni tocar. A lo mejor Andrés solo fue alguien de paso.... Eso suele suceder mucho. Hay personas que solo mueven pasiones explosivas, otras que son aves de paso y algunas veces, las últimas son las que se quedan para siempre.
-Eso no lo puedo saber yo. En mí funciona de otra manera, no es que no quiera dejarme llevar por mis impulsos, pero con ellos todo sabe mejor, y mucho más cuando tengo unas copas encima. Puedo ser libre e irme de bruces contra el primer chispazo del alma. Después de haber probado te das cuenta si conviene o no, es así de simple.
-A lo mejor, pero no siempre se encuentra el amor en una cama de hotel o detrás de las colillas de cigarrillos y copas de licor. Lo que te pasó con él, fue una emoción incalculable que revolvió cada fibra de tu ser, pasa casi siempre...en cambio, yo si tengo ganas de amor y no de pendejadas de una noche, así tampoco funciona para mí Alejandra.
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